sábado, diciembre 29, 2012

Artículo Relacionado: Crean Sistema de Olfato Electrónico.


Científicos desarrollan una "nariz electrónica" capaz de localizar delincuentes.

Este dispositivo que detecta la "huella aromática" de cada ser humano y busca emular el olfato canino, podría ser utilizado además para hallar enfermedades como cáncer o Parkinson.
 
JERSUSALÉN.- Científicos israelíes del Instituto Tejnión de Haifa están desarrollando una "nariz electrónica" para detectar la "huella aromática" de seres humanos, y que podría ser empleada en el futuro en la identificación y localización de todo tipo de delincuentes.

En una investigación financiada por el Ministerio de Seguridad Interior de Israel, un equipo científico bajo la dirección del profesor Husam Hayek ha recurrido a microscópicos sensores químicos para identificar las trazas intransferibles del olor que desprende cada individuo.

"Es como una huella digital, todos tenemos un olor particular y la investigación trata de descubrir si se puede establecer una vínculo concluyente que pueda ser empleado en tribunales", dijo a Efe Tzvika Kanfer, director de Ciencias Exactas y Tecnología en el citado ministerio.

La investigación, que durante 2013 pasará la prueba decisiva de eficacia, se inspira en el olfato de los perros, animales con miles de "receptores" capaces de detectar, analizar e identificar el olor de objetos y personas.

"Tratamos de emular el olfato canino de forma electrónica", explica Kanfer simplificando lo que realmente se esconde detrás de la investigación: miles de algoritmos e incontables retos científicos en el campo de la nanotecnología.

Uno de ellos es el de que la "nariz electrónica" reproduzca desde el proceso de inhalación de partículas hasta el de análisis de aromas que se realiza en el cerebro humano, y que atribuya eficazmente a la persona en cuestión una "identidad".

"El cerebro se especializa en la identificación de patrones y al identificar el de un olor busca en su almacén de memoria para determinar de qué o quién se trata", explica.

El olor que deja una persona al respirar o tocar un objeto consta de un "patrón aromático" singular en cada individuo, pero lo más difícil es "sintetizar ese patrón de otros olores ambientales con los que se mezcla". Todo un reto para los sensores, que deben sintetizar el patrón de entre toda la contaminación que va acumulando el cuerpo a lo largo del día.

Perfumes, olores de comida, humo, gasolinas y otros agentes químicos de uso diario son algunos de los elementos que van diluyendo la firma aromática, pero que aún así los perros saben sintetizar a través de su desarrollado olfato.

Otros fines para la "nariz electrónica"

La investigación se realiza en el Departamento de Ingeniería Química del Tejnión, aunque su objetivo original dista mucho de los fines en materia de seguridad que se ha fijado el ministerio.

Los científicos trabajan en realidad en un mecanismo olfativo para la detección de enfermedades, entre ellas el cáncer y el parkinson, y se basa en la premisa de que el "patrón aromático" que desprende una persona enferma es distinto al de una sana.

"Al respirar, la persona desprende unas -llamémoslas- partículas químicas, y en un futuro no muy lejano los médicos podrán detectar si está o no enferma de acuerdo a su tipo", asegura Kanfer al comparar el proceso de detección con el de una prueba de alcoholemia en carretera, salvando las grandes diferencias científicas.

domingo, diciembre 16, 2012

Artículo Relacionado: Existen personas "Asexuales"?


Asexuales: La cuarta orientación sexual que se abre paso.

Se cree que cerca del 1% de la población, simplemente, nunca ha sentido interés sexual en su vida, y encontraron en la asexualidad el término que encajó perfecto con su forma de relacionarse: amorosamente, pero sin sexo.

EmolSa. 15 de diciembre de 2012, 07:00

Catalina Avaria, El Mercurio.

Asexuales: La cuarta orientación sexual que se abre paso.

“En mi vida he encontrado a alguien atractivo sexualmente hablando. Cuando pienso en sexo, solo siento repulsión. La única manera en la que me atrevería a hacerlo, sería para tener una guagua. Pero entonces sé que tendría que abstraerme y fingir que esto lo está haciendo otra persona. Siempre me he sentido así… La gente cree que debe haber un motivo por el que pasa esto, pero no creo que el mío sea el caso. Algunas personas, simplemente, nacen así, y yo soy una de ellas” (Sophie Zeleda, 23 años, “The Sun”).

“Los deseos de él y atracciones eran, bueno, diferentes a los míos, y no creo que alguna vez se haya dado cuenta lo que realmente pasaba conmigo. Habían asuntos sexuales desde el comienzo: él lo quería y yo me sentía influenciada teniendo un novio. Recuerdo haberme sentido extraña después. Habiendo pasado años sin pensar en estas cosas, estaba claro que yo realmente no quería tener sexo (…) Terminamos como amigos” (Neth, 25, The Guardian).

Ambos casos representan el uno por ciento de la población mundial, que aseguran no sentir atracción sexual a nada. Incluso se habla de unas 70 millones de personas que se autodenominan “asexuales”.

“En teoría, la falta de deseo sexual no debería ser un problema. Pero estamos en un medio que sugiere la hipersexualidad como norma. (Por lo que) la asexualidad se ha convertido en un ‘problema’ ya  que se hizo más visible y en cierto modo, se ha convertido en el nuevo estigma”, aseguró el profesor asociado de la Universidad de Brock (Canadá), Anthony Bogaert.

En  octubre pasado, Bogaert publicó el libro “Understanding Asexuality”, en el que explica su investigación  hecha en 1994, en la que analizó las respuestas de 18 mil personas en el Reino Unido, en la que el uno por ciento aseguró no haberse sentido nunca atraído sexualmente.

Según sus conclusiones, la asexualidad representa una población cada vez mayor de personas que carece de un estudio profundo, ya que se suele confundir su total desinterés sexual en la represión de sus instintos o un trauma escondido de la infancia.

“Cuando ‘salí del clóset’ con mis padres, inmediatamente me dijeron que no me limitara a mí mismo. Creo que ellos lo pasaron muy mal pensando cómo podría ser feliz sin que la sexualidad formara parte de mi vida”, ha comentado David Jay, el hombre que se ha transformado en el vocero de la asexualidad, y en uno de los principales impulsores de que ésta se considere una cuarta orientación sexual.

Preocupado por la falta de información que existía acerca de lo que consideró desde su adolescencia, su condición sexual, comenzó en 2001 el sitio web AVEN (Asexual Visibility and Education Network), que hoy cuenta con 50 mil miembros.

Allí, junto con difundir qué significa ser asexual, se difunde la idea de que la intimidad de las personas o con una pareja no tiene por qué ser la sexual, y que ésta última no es mejor que la anterior. Además, entrega una puerta de salida a aquellas personas que no han sentido atracción sexual hacia otros, y han mantenido en secreto su realidad, mientras viven rodeados de conversaciones de índole sexual, entre sus amigos.

Para ellos es que Suzie King, life coach, comenzó el sitio Platonic Partners, en 2007. El hecho que gatilló la página -en la que personas asexuales, o que prefieren el celibato, pueden encontrar una pareja que, como ellos, no buscan tener relaciones sexuales-, fue el intento de suicidio de uno de sus pupilos. “Él estaba muy solo y no podía vislumbrar un futuro en la que alguien quisiera tener una relación con él sin sexo”, comentó la mujer al The Guardian.

“Ésta es una orientación sexual porque no es una opción, es la forma en que la mayoría de nosotros ha sido durante toda su vida”, comentó, por su parte, Jay a otro medio británico, en el que explicó que actualmente mantiene una relación con una mujer, también asexual, con la que espera en el futuro poder adoptar un niño.

Fin del Artículo de El Mercurio.

Nota : Sobre este interesante tema, recomiendo revisar mis capítulos sobre sexualidad en http://www.conductahumana.cl